Premios Oscars

La gala de los Premios Oscars 2025 encumbró como ganadora a 'Anora', que cosechó cinco galardones. Cuando subió a recoger el de Mejor director, Sean Baker quiso agradecerle a Quentin Tarantino por descubrirle a Mikey Madison en 'Érase una vez... en Hollywood'... aunque la que le hizo decidirse por ella no fue otra que la saga 'Scream'.

Hoy de madrugada fueron los Premios Óscar 2025 y 'Anora' se coronó como la clara triunfadora de la ceremonia. Las mayores perdedoras de la lista de ganadoras fueron 'Emilia Pérez', que apenas rascó dos premios a continuación de batir récords con 13 nominaciones; 'Cónclave' además se quedó por debajo de lo esperado, 'A complete unknown' se fue de vacío y 'La sustancia' se llevo una unidad de estatuilla y gracias.

Se está acercando el esperado clímax de la noche de los Oscars, que seguimos en directo, y se le está poniendo todo bastante de cara a "Anora". Ahora mismo Sean Baker acumula tres premios él solo tras lograr el premio a Mejor dirección, siguiendo los galardones a su guion y a un montaje realizado por él mismo.

El cineasta, símbolo del indie USA reciente, está rozando una noche histórica.

Cuando salieron las nominaciones a los Oscars 2025, sorprendió encontrar a 'The Apprentice: la historia de Donald Trump' en varias categorías, teniendo en cuenta que el presidente de EE.UU. ha hecho todo lo posible por tomar acciones legales contra el film. No es de extrañar, ya que el retrato que hace de Trump no escatima en tirar de mala leche y humor negro, y ya lo podéis ver en streaming a través de Movistar Plus+.

Con la gala de los Premios Óscar 2025 a la vuelta de la esquina, es momento de realizar un breve análisis a la categoría de mejor banda sonora original, pero antes me gustaría compartir una reflexión: la abundante cantidad de galardones y su correspondiente publicidad, está consiguiendo que los resultados de los premios de cine sean bastante predecibles.

'Anora' parte en las quinielas como gran favorita para llevarse el Oscar principal de la noche, el de Mejor film. Sin embargo, los Oscar son mucho más que una mera votación que escoge a el filme del año: entran en juego no solo las millonarias campañas publicitarias de las que tanto se habla (que además), sino modelos de probabilidad matemática y el mismo sistema de votación, que no permanentemente favorecen a la favorita de la mayoría simple de los académicos.

La niña bonita.

Hablar de proezas en el cine es tener en mente un montón de filmes, directores y actores que han marcado una huella indeleble en la industria, sin embargo, cuando de estar en el gusto del público y al mismo tiempo, conquistar a los críticos de la Academia, muy pocas han podido marcar capítulos en la historia, tal como lo ha hecho una adaptación al cine de los libros de J. R. R. Tolkien que ha establecido un récord complicado de superar.

Cuando en 2021 Antonio Banderas hizo una gala de los Goya sobria y medida, que era lo que uno esperaba de un año marcado por el Covid, fue aplaudido a diestro y siniestro. Lo que nadie esperaba es que la Academia de Cine iba a entender que, todas las galas tenían que carecer de dinamismo y debían ser una sucesión de dramas expuestos de manera continua, sin ningún momento cómico para relajar el ambiente. Que se ocupen las canciones constantes de separar los bloques de premios.

Un día más, una nueva muesca en la telenovela diaria de Karla Sofía Gascón. Y es que, tras la explosión de tuits y las declaraciones, ahora llega el tercer acto: las consecuencias. Y con ellas, una nueva mirada hacia la actriz. Primero fue el malestar, luego el ostracismo social, y ahora llega la inevitable compasión al ver cómo, a solo un mes de cumplir el sueño de cualquier intérprete, va a quedarse emborronado. Aún quedan giros por ver en esta historia, eso sí. Y vaya que si los veremos.

Por suerte, estoy bastante seguro de que casi todos los periodistas (sobre todo los recién licenciados y los viejos lobos), hoy por hoy, quieren ser objetivos, decir la verdad, bajar a la calle y desenmascarar las villanías de la corrupción. Pero en el día a día hay que pagar un alquiler, y toca plegarse a los cutres y apolillados estándares de la macro-corporación que paga las facturas y correr en su línea ideológica, estés más o menos de acuerdo con la misma.