Un día más, una nueva muesca en la telenovela diaria de Karla Sofía Gascón. Y es que, tras la explosión de tuits y las declaraciones, ahora llega el tercer acto: las consecuencias. Y con ellas, una nueva mirada hacia la actriz. Primero fue el malestar, luego el ostracismo social, y ahora llega la inevitable compasión al ver cómo, a solo un mes de cumplir el sueño de cualquier intérprete, va a quedarse emborronado. Aún quedan giros por ver en esta historia, eso sí. Y vaya que si los veremos.