Entre los años 2020 y 2021, cuando aún estábamos sumidos en el punto álgido de la pandemia de Coronavirus que ya parece un mal sueño perdido en el tiempo, los astros y el talento se alinearon para que la industria cinematográfica y televisiva surcoreana diese el salto definitivo a la cultura popular "occidental" nótese el entrecomillado por el reduccionismo geográfico del término tras años de reivindicaciones por parte de propios y raros.