El final de la segunda temporada de 'Aquí no hay quien viva' venía con una sorpresa. Paloma, uno de los personajes indispensables de la serie se fue para no volver. La trama lo resolvió de forma más o menos cliché. Tras una caída al patio se quedó en coma. Los guionistas dejaban la clásica puerta abierta que le permitía a la intérprete volver si así lo quería, pero aquello nunca sucedió.