Cuando hablamos de optimizar nuestro entrenamiento y distribuir las sesiones a lo largo de la semana, es crucial entender cómo se interrelacionan las variables de frecuencia de entrenamiento y recuperación de la fatiga. Pero, un concepto destacado que debemos recordar es que no necesariamente tenemos que optar por microciclos de siete días, es decir, que podemos trabajar con rutinas que consten de cinco sesiones aunque nosotros solo entrenemos cuatro veces por semana.