Elon Musk, el visionario detrás de Tesla y SpaceX, sorprendió al mundo hace tres años cuando reveló en una entrevista televisiva que tiene síndrome de Asperger. Esta noticia, lejos de ser una simple confesión personal, ha servido como un impulso para aumentar la conciencia pública sobre esta condición, categorizada dentro del llamado 'espectro autista'.