Cuando vamos al gimnasio para ganar músculo, es frecuente oir dos teorías distintas sobre cómo realizar los ejercicios: las repeticiones estrictas, controladas y sin impulso, frente a las llamadas "repeticiones trampa", que aprovechan el impulso o balanceo del cuerpo para mover más peso. Recientemente, un estudio científico examinó ambas técnicas, evaluando si alguna es realmente superior para aumentar la masa muscular.