Se suele discutir más en términos de espectacularidad y visceralidad humana, pero el género bélico presenta siempre unas increíbles oportunidades para hablar a un nivel político. Ya sea por su propia naturaleza conflictiva de ser una denuncia a la violencia de la guerra o por casos más específicos, como muchos de los films centrados en Vietnam que surgieron casi como una manera de procesar un evento fundamental para toda una generación de cineastas americanos.