herido

El formato físico de filmes ha sido de mis principales fuentes de gasto económico desde que he tenido dinero suficiente para comprar algo más que chucherías. Obviamente, soy consciente de que los mejores años de ese mercado hace mucho que quedaron atrás y que el auge del streaming ha llevado a que esté en una situación tan delicada que resulta muy complicada hablar de ellos en otros términos que no sea el de estar herido de muerte.

Todos hemos visto en alguna ocasión cuando hemos ido a comprar entradas al cine o reservar un viaje una frase que refleja que los pensionistas tienen un descuento en su compra. Esto se debe, que al igual que los jóvenes tienen su propio carnet o el bono cultural, las personas más mayores además cuentan con un certificado que les identifica para acceder a este tipo de bonificaciones. Lo que podemos considerar un carnet de jubilado o pensionista.