No voy a comenzar una batalla hablando de qué es
idioma y qué es dialecto. En el mundo existe un registro de casi 8,000 lenguas y cada pocos minutos desaparece una de ellas. Hay más de 2,000 en peligro. De hecho, se estima que el 96% son habladas solo por un 3% de la población mundial. ¿Qué significa eso? Hegemonía.Â
Solo hace falta echar un ojo al gráfico que sirve de portada para el artículo. Elaborado para el South China Morning Post en 2015, este mapa visual muestra la escasa inmensidad de las lenguas más habladas del mundo. Y cómo unas pocas, menos de 20, gobiernan sobre el resto. Esto podría considerarse una buena noticia: en una Babel más plural es más complicado un entendimiento claro. Pero cada vez que se pierde un
idioma, con él se pierde una enorme riqueza cultural, sus matices y su genealogía lingüística.Â
El gráfico de Visual Capitalist da dos claves: el inglés es la lengua más hablaba en todo el mundo digital, pero en el mundo analógico el peso del chino, sobre el conjunto de hablantes globales, es ineludible. Â Y mucho ojo al español y al hindú. Irónicamente, uno de los que mayor crecimiento está mostrando no es otro que el francés, abajo del todo en esa circunferencia. ¿Por qué? Porque es la lengua madre de muchas colonias africadas donde las lenguas nativas han ido quedando enterradas a favor de un
idioma que abre las puertas a una Europa actual.