En una conferencia en
Londres, gobiernos y reguladores a no exagerar con respecto al incremento de consumo provocado por la explosión de la popularidad de la inteligencia artificial generativa y los data centers que precisa para funcionar.
Indudablemente, el desarrollo de una tecnología que precisa de una capacidad de procesamiento enorme soportada por data centers cada vez más grandes da lugar a un fuerte incremento del consumo de electricidad, que algunos comparan con el consumo eléctrico total de un país pequeño como los Países Bajos. La propia Microsoft ha anunciado en su memoria corporativa que el desarrollo de de la inteligencia artificial generativa y su incorporación a prácticamente todo tipo de funcionalidades en sus productos ha dado lugar a un incremento del 30% en su consumo total de electricidad, y la ha obligado a retrasar sus objetivos de reducción de su huella de carbono.
Ahora bien, todos los que peinamos algunas canas en el entorno de la tecnología recordamos cómo, efectivamente, muchos se echaban las manos a la cabeza hace años con el incremento de consumo que suponían las consultas a buscadores como Google, con unas estimaciones que resultaron no solo ser completamente erróneas, sino que además, obviaban completamente los ahorros de energía muchísimo más importantes generados debido a la disponibilidad de esa información.