Relaciones

Los empleados de la fábrica que Tesla tiene en la ciudad alemana de Grünheide de baja por enfermedad están recibiendo visitas en sus casas de directivos de la compañía. El objetivo es comprobar si sus bajas son reales y esto ha causado un gran revuelo, como no es para menos.

Como recoge el medio alemán Handelsblatt, "cuando los jefes tocaron el timbre, muchos empleados de Tesla se sintieron abrumados. Algunos simplemente no abrieron la puerta, otros incluso quisieron llamar al 110 (el teléfono de las emergencias que necesitan de la policía).

Elon Musk decía a sus trabajadores que si veían problemas, saltaran a sus jefes y hablaran con él. Hacerlo podía traerte problemas


Las visitas de inspección llevadas a cabo por el director general André Thierig y del director de recursos humanos Erik Demmler no fueron bien recibidas por muchos empleados en situación de baja por enfermedad. De acuerdo con información filtrada a los medios, Demmler dijo en una reunión hace unos días que "se notaba por la agresividad" que esas visitas no fueron recibidas con agrado.

Según el periódico alemán mencionado, un director de la Gigafactory Berlin-Brandenburg de Tesla envió a sus directivos a controlar a unos 30 empleados enfermos. La información se ha filtrado gracias a la grabación de una reunión interna.