Entre 'Licencia para matar' y 'Goldeneye' (o lo que es lo mismo, entre Timothy Dalton y Pierce Brosnan) pasaron seis años, el mayor tiempo que hemos estado sin filmes de
James Bond. Sin embargo, es probable que luego de 'Sin tiempo para morir', la cinta final de
Daniel Craig, aún tengamos que esperar más, dado que ni siquiera se ha anunciado aún quién será su sustituto. Y el actor, mientras tanto, sigue presentando 'Queer', su nueva film, y repasando su amplia carrera.
Aunque la mayoría de la gente pensará en
James Bond al verle, que rodó con
Steven Spielberg el año antes de estrenarse como 007. Y si te preguntas cómo es rodar con un mago del cine como el director, Craig se lo ha explicado a Mark Kermode en una entrevista en el BFI de Londres. Y, no ha tenido malas palabras al respecto de él: "Creo que, muy brillantemente, no te da demasiado. Llega el día antes de rodar y se marcha esa noche. Es algo de 'Tiburón', creo que es una tradición que tiene. Así que apenas le ves".
De hecho, recuerda la primera escena que rodó en 'Munich', en la que el plano seguía a un coche en en movimiento. Craig lo recuerda perfectamente: "La cámara venía desde la calle, se acercaba hacia mí y luego rodeaba la parte trasera del coche y se alejaba. Y esa fue su primera toma".
Pensad que el primer día de trabajo os encontráis con este virtuosismo: "Yo estaba en plan 'He llegado, ¿vale?', y a continuación en plan '¡Oh, dios mío!'.