China es el país de las megaconstrucciones. Aunque estos últimos años
Arabia Saudí y
Emiratos Árabes están intentando acaparar todas las miradas con rascacielos imposibles y la polémica ciudad
The Line, hablar de construcciones realmente enormes es hablar de
China. Desde túneles indescriptibles hasta puentes faraónicos, el gigante asiático nos sorprende de vez en cuando con algún proyecto que sólo se puede calificar con una palabra: colosal.
Dentro de esa categoría también hay vehículos, y
China ya puede presumir de tener el avión anfibio más grande del mundo.
AG600. Ese es el nombre oficial de un avión que, durante sus 16 años de desarrollo, conocimos como "Kunlong", o "Dragón de agua". Es obra de la Corporación de la Industria Aérea de
China (o AVIC), un consorcio chino que se dedica a la fabricación de aviones, y es realmente descomunal:
- Puede albergar a 50 pasajeros.
- Puede despegar con un peso total de más de 53 toneladas.
- Tiene un alcance de 4,500 kilómetros y sus cuatro motores turbohélice pueden sostener una velocidad de 570 km/h.
Todo esto, midiendo 36,9 metros de largo y con una envergadura de 38,8 metros. Es similar a un Boeing 737, que se dice pronto.
La aviación
china acaba de dar un destacado salto hacia el futuro: su primer avión eléctrico ha sido certificado
Multifunción.