La falta de tiempo es la barrera más utilizada por las personas que no realizan ejercicio físico de manera frecuente. Para intentar eliminar esa limitación, te proponemos un entrenamiento completo que puedes hacer en casa sin
material en muy poco tiempo. Si aún así no eres capaz de hacerlo dos o tres veces por semana, la falta de tiempo no era la excusa, y lo sabes.
Cuando la falta de tiempo nos impide entrenar sin prisa en el gimnasio, podemos recurrir a circuitos en los que limitamos el tiempo de descanso entre series de manera que reducimos drásticamente el tiempo total de la misma. Cuando entrenamos fuerza necesitamos dejar al músculo descansar durante un par de minutos para volver a realizar otra serie.
Si lo analizamos, utilizamos de media un 75% de la sesión descansando y un 25% entrenando, lo que hace que se alargue. Ese descanso es necesario, así que la única forma de invertir esos porcentajes es introducir otros ejercicios que trabajen grupos musculares distintos mientras descansamos el que acabamos de estimular.
De esta manera, si entrenamos los músculos de empuje del tren superior con unas flexiones, utilizaremos ese tiempo de descanso para estimular la espalda, el core y las piernas. Aunque la intensidad no será la misma que si estamos sentados descansando hasta el próximo serie, a nivel muscular sí habremos dejado descansar a esos grupos musculares hasta que los volvamos a tocar.