La estrategia de
YouTube para limitar el uso de bloqueadores de noticias y fomentar la suscripción a su servicio
Premium ha tenido un impacto inesperado. Según un estudio reciente, la demanda de bloqueadores de anuncios ha aumentado un 336 % desde que la plataforma comenzó a aplicar restricciones más severas. Esta situación refleja un rechazo generalizado de los clientes hacia las noticias y la poca disposición a pagar por una experiencia sin interrupciones publicitarias.
Desde el año pasado,
YouTube intensificó sus esfuerzos para combatir los bloqueadores de anuncios. Esto incluyó medidas como la detección de estas herramientas y la imposibilidad de instalarlas en navegadores como Chrome, donde Google restringió extensiones populares como uBlock. La intención era clara: incentivar a los clientes a suscribirse a
YouTube Premium, un servicio que ofrece una experiencia sin anuncios por 13,99 euros al mes.
Sin embargo, la estrategia no ha salido como se esperaba. Según datos de All About Cookies, solo un 12 % de los clientes está dispuesto a considerar la suscripción a
YouTube Premium. Además, más de la mitad (52 %) de los encuestados afirmó que no pagaría absolutamente nada por evitar las noticias en la plataforma.
En lugar de optar por el servicio
Premium, los clientes han buscado alternativas para seguir evitando las noticias.