La
Gobernadora del Estado de Nueva York,
Kathy Hochul, ha firmado la aprobación de un nuevo paquete legislativo exigiendo a las compañías petroleras que aporten miles de millones de dólares para crear un
Climate Superfund, un fondo que se dedicará a cubrir las eventualidades que puedan surgir de la emergencia climática que han contribuido a generar a lo largo de los años.
La ley permitirá recaudar setenta y cinco mil millones de dólares en veinticinco años de los más importantes compañías petroleras, exigiéndoles que paguen por el daño causado por unos fenómenos climáticos cada vez más severos y que son, científicamente y sin ningún género de dudas, responsabilidad suya.
La ley considera, de manera más que razonable, que el desarrollo de la ciencia de la atribución climática a lo largo de los últimos años permite llevar a cabo rigurosos estudios de relaciones causa-efecto entre el cambio climático y los fenómenos extremos, y utilizarlos para estimar las correspondientes responsabilidades.