Mucho se habla de proteína y carbohidratos, pero poco de vitaminas y
minerales. Los primeros se conocen como macronutrientes y, se encargan de dar energía al
cuerpo y mantenernos con vida. Las vitaminas y
minerales son micronutrientes y hacen que nuestro
cuerpo esté sano y
funcione a la perfección. A medida que cumplimos años se van modificando las necesidades de micronutrientes.
Las vitaminas ayudan a que el
cuerpo crezca y
funcione como debería. Hay 13 vitaminas esenciales: vitaminas A, C, D, E, K y las vitaminas B (tiamina, riboflavina, niacina, ácido pantoténico, biotina, B6 , B12 y folato). Cada una de ellas tiene funciones específicas, aunque siempre se apoyan entre ellas.
Los
minerales también ayudan al funcionamiento del organismo. Algunos muy conocidos son el calcio, el magnesio o el potasio, pero hay muchos más. Al igual que las proteínas, cada uno tiene funciones más destacadas por lo que hay que ingerir las cantidades adecuadas de vitaminas y
minerales para que nuestro
cuerpo funcione a la perfección.
Existen unas vitaminas y
minerales clave para personas mayores de 50 años, aunque como hemos relevante anteriormente: hay que consumirlas todas hasta superar el umbral mínimo, al menos. Estas son los principales vitaminas y
minerales que no deben faltar especialmente en los
adultos mayores, según el Instituto Nacional de Envejecimiento de Estados Unidos.