Aunque
macOS trata de gestionar de forma automática todos los elementos
basura y eliminarlos, lo cierto es que permanentemente quedan elementos residuales en el Mac, especialmente en las aplicaciones. Y los llamamos residuales y documentos
basura porque realmente no son imprescindibles para el funcionamiento del ordenador.
En conjunto, estos documentos pueden ocupar mucho espacio de la memoria y aunque hay buenos trucos para liberar espacio del Mac, uno de los más interesantes es aquel al que accedemos mediante tres teclas que todos estos ordenadores tienen. Combinándolas llegamos a la madre de todas las carpetas de
macOS y en la que podemos encontrar todos esos informes
basura. Sirve además en cualquier versión de
macOS.
Siguiendo un poco con la definición de informes
basura, el origen de estos elementos es variopinto. Son elementos generalmente de carácter temporal, pero que sin embargo permanecen en el sistema. Por ejemplo, cuando eliminamos una aplicación o un documento.
Si bien normalmente nos encargamos de ir eliminando informes de forma manual, el problema que tienen estos informes
basura es que son invisibles y por tanto su búsqueda para borrarlos no es tan sencilla.