La ley china es compleja para cualquiera. Incluso para una Apple que, pese a su constante reducción de ingresos en el país, sigue siendo una de las compañías más valiosas del país. La irrupción de la IA generativa no ha hecho más que darle dolores de cabeza y precisamente por la ley, la cual impide que funciones como las de Apple Intelligence lleguen sin más a China.
Apple tiene un problema para expandir su IA en China: necesita un socio chino.