Blue Origin ha conseguido poner en órbita el imponente cohete New Glenn y, según Jeff Bezos, podría llegar a ser más grande que Amazon en el futuro. Pero por ahora, su prioridad es reducir costes y aumentar el número de lanzamientos. Para conseguirlo, la compañía espacial ha anunciado el despido de alrededor del 10 por ciento de su fuerza laboral.
Con una plantilla de unos 14,000 empleados, Blue Origin recortará cerca de 1,400 puestos, según Reuters.