Los clásicos monederos y billeteros han dado paso a los tarjeteros. Son más pequeños, cómodos y prácticos para llevar, incluso en bolsillos pequeños. Y son consecuencia de que todos nuestros archivos legales, tarjetas y dinero, sean en formato plástico. Pero el siguiente paso ya está en marcha: trasladar el plástico a nuestro teléfono inteligente.