El Tribunal Superior de Justicia de Castilla La Mancha ha dictado sentencia sobre el despido de un trabajador de Mercadona en Talavera de la Reina, Toledo, que se comió una croqueta cuyo destino alternativo era la basura. Y la sentencia es clara: es un despido improcedente porque "no hubo apropiación indebida ni ánimo de  lucro" en el acto de comerse la croqueta.