El thriller o el filme de terror con alegoría directa se ha vuelto un terreno muy explotado a raíz del concepto elevado volviéndose cada vez más conocido y además por el éxito de "Déjame salir". Tanto en términos comerciales como de prestigio, la película de Jordan Peele se ha vuelto un modelo a imitar, aunque no tanto a seguir en aquello que sobresalía.
Tampoco es un drama, no todos los filmes tienen que ser una experiencia transformativa si son capaces de ser una sensorial.