En algún momento tenía que llegar, porque al final, todo llega a su fin, incluso los materiales para la energía renovable. Primero le llegó el turno a los paneles solares, que ahora cuentan con centros de reciclaje. Luego, le tocó el turno a la energía eólica que sus palas han encontrado una segunda vida en diferentes estructuras, desde mini viviendas hasta incluso gominolas.