Que la IA generativa está a un paso de humanizarse es una realidad. De hecho, ChatGPT está muy cerca de ello. Tanto que asusta. Es por eso por lo que muchos pacientes con problemas de salud mental recurren al chatbot para consolarse, algo que ha tratado The Washington Post en un reciente artículo.
En él se abordan varios casos reales de personas que prefieren usar la IA a acudir a especialistas.