Es una de esos anuncios que tendrías que haber pasado las últimas semanas metido en una cueva en las profundidades para no haber visto: la irrupción en el panorama de la inteligencia artificial generativa de Deepseek, un modelo chino que prueba lo que llevo tiempo diciendo: que las restricciones planteadas por la guerra comercial norteamericana están estimulando a las compañías chinas para ser más eficientes e imaginativas, superar la no disponibilidad de los chips más avanzados, y dar lugar a m