Tom Hanks es conocido por ser uno de los actores más versátiles y talentosos de
Hollywood. A lo largo de su carrera, ha asumido papeles que no solo han desafiado su capacidad actoral, sino que además han tenido un impacto cultural significativo.
Uno de los ejemplos más importantes de esto es su interpretación de
Andrew Beckett en el film 'Philadelphia' (1993), dirigida por
Jonathan Demme. Este drama legal fue una de las primeras grandes producciones de
Hollywood en abordar abiertamente la epidemia del VIH/SIDA y la discriminación que enfrentaban las personas portadoras de esta enfermedad.
En 'Philadelphia', Hanks interpreta a
Andrew Beckett, un abogado talentoso que es despedido de su bufete tras descubrirse que es portador del VIH. La historia sigue su lucha legal por justicia, mientras lidia con el deterioro de su salud.
Lo más curioso de la cinta, Hanks no solo se sumergió en el aspecto emocional del papel, sino que además llevó a cabo una transformación física notable: perdió alrededor de 12 kilos para retratar de manera realista el impacto del VIH en el cuerpo de Andrew, una proeza que no sólo necesitó de un sacrificio por parte del actor, sino que también fue una muestra de la planeación de el film, puesto que fue filmada enteramente en orden cronológico.
"Empecé a recogerlas y ya tengo más de 650".