Probar software nuevo o potencialmente peligroso puede ser una pesadilla si no se hace con las precauciones adecuadas. Afortunadamente,
Microsoft ha puesto a disposición de los clientes más avanzados una herramienta compuesta en Windows que permite hacerlo de forma segura, sin complicaciones ni necesidad de herramientas de terceros:
Windows Sandbox.
Windows Sandbox simula un segundo sistema operativo dentro del tuyo, donde puedes ejecutar aplicaciones, abrir informes o simplemente hacer pruebas sin miedo a que algo dañe tu instalación más relevante. Lo mejor de todo es que una vez terminas de usarlo, todo lo que hayas hecho allí se borra por completo y sin dejar huella.
Windows Sandbox es una funcionalidad de Windows 10 y Windows 11 que proporciona un entorno aislado, temporal y desechable para ejecutar aplicaciones sin poner en riesgo el sistema operativo más importante. Se trata de una especie de «ordenador virtual» que se arranca dentro de tu propio sistema y que se elimina completamente al cerrarlo.
Está pensado para quienes necesitan ejecutar informes .exe desconocidos, trastear con el sistema sin miedo a estropear algo. Es muy útil para desarrolladores, técnicos de soporte o clientes que abren con frecuencia documentos recibidos por correo de fuentes desconocidas.
Más importantes cualidades de Windows Sandbox
- Integrado en Windows: no necesitas descargar herramientas externas ni imágenes de sistema.