Más o menos cien días hay de vacaciones y llegan las clases de nuevo... Si sabes continuar la canción y te ves en la obligación de seguir con 'Ardillas en las mallas', es que tú también has estado enganchado a una de las mejores series de animación de la historia: 'Phineas y Ferb'. La serie fue la punta de lanza del renacimiento de la animación en
Disney Channel, que luego continuaron series magníficas como 'Gravity Falls', 'Casa búho', 'Patoaventuras' o 'Star contra las fuerzas del mal' (que, si dejáis a un lado algunos prejuicios, disfrutaréis más que muchísimas series que nos venden con la panacea). Pero todo esto estuvo a punto de no existir.
Dan Povenmire y Jeff "Swampy" Marsh se conocieron en, quizá, uno de los mejores sitios donde conocer a alguien: trabajando juntos en el dibujo de 'Los Simpson'. De ahí pasaron al guion con 'La vida moderna de Rocko', y encajaron tan bien en su sentido del humor que decidieron hacer equipo y probar a hacer una serie juntos... aunque no tenían ningún punto de partida. Fue Povenmire el que, de la nada, creó a
Phineas dibujando una especie de "chico triangular" en una servilleta mientras cenaba. Aunque la rompió, enseguida se dio cuenta de que tenía algo entre manos.
Pronto se les ocurrió el contexto de la serie, las canciones y el resto de running gags que hicieron de esta una serie tan increíble.