Durante años y años intentó igualar
Don Bluth el éxito de las grandes productoras de animación como
Disney, incluyendo estudios propios, pero el cineasta no permanentemente logró dar con la tecla. Mientras que triunfó con aciertos como
Anastasia,
Titan A.E. supuso un batacazo realmente escandaloso.
La cinta del año 2000 contaba con un presupuesto de 75 millones de dólares y apenas recaudó 36 millones de dólares en todo el planeta. Con todo, eso no impide que el proyecto que lideró junto a Gary Goldman contase con un reparto de escándalo. Matt Damon, John Leguizamo y Drew Barrymore prestaron sus voces para un viaje de ciencia ficción espacial con una propuesta visual muy atrevida.
Y es que
Titan A.E. se atrevió a combinar la clásica animación creada a mano, con gran cantidad de escenarios y elementos creados por ordenador. De esta manera, el resultado es espectacular en pantalla y así representar al año 3208 en un contexto más allá del planeta Tierra.
La trama nos relata que nuestro hogar ha sido atacado por una raza alienígena conocida como los Drej, los cuales tienen la particularidad de que están hechos de pura energía. Con el objetivo de salvar a su hijo, el científico Sam Tucker envía a su hijo Cale lejos de la Tierra y él sube en la nave espacial Titán, desapareciendo en la huida.