Algunos sets de película suponen tal labor de construcción que es una verdadera lástima tener que echarlos abajo cuando termina la producción. En el caso de 'Popeye', el filme de 1980 protagonizada por Robin Williams y basada en el popular personaje animado, esto es algo que no se hizo. La pérdida aquí habría sido demasiado grande, ya que hablamos de una recreación exhaustiva que excedió incluso las necesidades del rodaje de el film.