Una de las primeras tareas pendientes cuando nos quedamos sin empleo, estamos a la búsqueda de nuestro primer trabajo o deseamos un puesto mejor es actualizar nuestro currículum. Y es que tener el CV al día es relevante, pero que este esté bien hecho es directamente esencial. Al fin y al cabo en los departamentos de
RRHH de las empresas llegan decenas de curriculums de potenciales aspirantes, por lo que resulta complicado destacar con un simple vistazo.
¿Cómo debe ser un buen currículum? A grandes rasgos, experiencia laboral y habilidades y además hacerlo con una estructura legible, ágil y que resulte agradable a la vista. Eso sí, no es lo mismo postularse a un puesto de ingeniería de software que a un trabajo creativo de ilustración. Pero incluso aunque condensemos lo anterior y le dediquemos tiempo, podemos equivocarnos al redactar el CV.
Como explica Miguel Navarro, CEO de
Productividad Feroz y especializado en hábitos,
productividad y biohacking, para COPE un error muy común es centrarse en 'describir tareas, en lugar de logros medibles', quedándose en nivel descriptivo en lugar de contar lo que hemos conseguido. Culmina señalando que 'una empresa lo que quiere son resultados, es lo único que importa'.
Así, su sugerencia es que nuestro currículum diferenciador y llamativo es el que resalte el impacto tangible, con cifras, resultados y logros.