La startup valenciana
Quibim lleva años trabajando en el análisis y diagnóstico médico basado en inteligencia artificial. Esta empresa anunció recientemente una ronda de inversión de 50 millones de dólares, una cifra notable que permitirá impulsar la expansión de su línea de productos, el desarrollo de sus modelos de IA médica y su expansión global.
En Xataka hemos podido hablar con su fundador, cómo la inteligencia artificial está revolucionando el diagnóstico médico.
Alberich-Bayarri es de Benicarló, una localidad costera situada al norte de la Comunidad Valenciana. Estudió Ingenería de Telecomunicaciones en
Valencia, y durante sus estudios se interesó por la visión por computador y el análisis de imagen, pero se centró en un área específica: la imagen médica.
Aquello cambiaría su vida. Aunque trabajó para otras instituciones durante un tiempo, años más tarde decidió que quería emprender. Acabó fundando
Quibim con el médico Luis Marti-Bonmati, líder de opinión en radiología en nuestro país, aunque este último acabó desligándose de la empresa.
Durante esos primeros años hubo un foco fuerte en investigación y también en algo que como él dice para él fue un aprendizaje: "transicionar de investigación a producto". Él había publicado mucho sobre algoritmos aplicados al análisis de imagen, pero llevar esos descubrimientos a algo real es complicado, sobre todo en una industria médica en la que los estándares y la documentación son muy exigentes.